Pese a empatar sin goles, la progresión del C. D. Ebro es evidente
Se repitió el resultado de la temporada pasada y el marcador no volvió a moverse. Primer punto que el C. D. Ebro logra en La Almozara, con una clara progresión en el juego, manteniendo la portería a cero.
LA CRÓNICA, POR JOSÉ ANTONIO BUEN:
Progresa adecuadamente. No llegó la victoria, pero las sensaciones fueron diametralmente opuestas a lo acontecido hace dos semanas. El conjunto de Emilio Larraz sigue acercándose a lo que él desea y, ante el Alcoyano, dominó la situación y anuló los argumentos ofensivos de los alicantinos.
El fuerte viento dificultó bastante el juego y el C. D. Ebro lo tuvo en contra en la primera mitad, pero los arlequinados tuvieron las ideas claras y no se amilanaron ante tal circunstancia. Tras un tímido acercamiento alicantino, en un testarazo al lateral de la red de Fuentes, el resto del primer intervalo fue un completo monólogo azul y blanco. La tuvo Adri Cuevas tras un robo de balón, pero su disparo desde dentro del área lo abortó Galas.
Echó mano el cuadro local de la estrategia cuando Regino sacó en largo de banda y Adri Cuevas, con un poderoso salto, cabeceó a las manos del portero. Borja Rubiato tuvo una mañana intensa con su par, Mario Fuentes, con el que tuvo un intenso enfrentamiento, pero siempre dentro de los límites deportivos. El delantero se llevó a trancas y barrancas el esférico antes que la defensa impidiera el posible gol. Pudo anotar el C. D. Ebro, de manera involuntaria, ya que Galas desvió por poco a córner un centro de Regino.
No podía faltar en un partido en La Almozara una gran intervención del portero visitante, en este caso Bañuz, que impidió con grandes reflejos y felina estirada que el cabezazo de Regino terminase en su portería. Replicó el Alcoyano en una veloz acción ofensiva, en la que José García remató cruzado, saliendo el balón no muy lejos de la portería de Salva.
A FAVOR DEL CIERZO. Lo peor había pasado y tocaba remar con el dios Eolo a favor, por lo que se podía presuponer que sería más fácil generar ocasiones de gol. No fue así, el choque se volvió más embarullado, con más centrocampismo y, exceptuando el tramo final, el peligro brilló por su ausencia. Se protestó un posible derribo dentro del área a Javi Cabezas, pero no pareció que fuera una jugada merecedora de penalti. Otra vez a balón parado llegaba un ¡uy!, en un tiro a bote pronto de Regino desde el primer palo.
UNA OCASIÓN POR BANDO. Parecía que los equipos daban por bueno el solitario punto, cuando llegaron unos minutos finales frenéticos. Borja Rubiato se encontró con un balón que no despejó Pau Bosch, y su centro fue directamente a las manos de Bañuz, demostrando que lo suyo es más el marcar que el pasar. En el 88, el recién incorporado Cubero, probó fortuna con la izquierda, mandando el esférico al palo. Susto morrocotudo, pero en la jugada posterior pudieron quedarse los puntos en casa: Triangulación rápida que inició Mainz cediendo a Javi Cabezas, cuyo buen centro atrás se convirtió en un caramelo para un Salinas que se encontraba al borde del área pequeña, pero su remate se marchó alto. En su descargo, decir que el balón le botó justo cuando golpeó y la bota impactó por ese motivo en la parte inferior del esférico. Pudo haber también penalti en esta jugada, pues Salinas fue derribado al tiempo de rematar, pero el colegiado no quiso saber nada.
FICHA TÉCNICA
Club Deportivo Ebro: Salva, Regino, Simón, Pajarero, Alfonso, Forte, Javi Cabezas, Adri Cuevas (Salinas, m. 68), Borja Rubiato (Mainz, m. 84), Gerrit y Álex Cruz (Borja Martínez, m. 60).
Club Deportivo Alcoyano: Bañuz, Barreda, Navarro (Pau Boch,m. 26), Galas, Fuentes, Rivelles, López de Silva (Cubero, m. 87), Omgba, Arenas, Gato y José García (Kilian, m. 71).
Árbitro: Rubén Ávalos Barrera (Comité Catalán).
Tarjetas: Amarillas a los jugadores locales Gerrit y Borja Martínez. Del Alcoyano para Navarro, José García y Arenas.
Incidencias: Unas 400 personas en las gradas de La Almozara. El partido fue televisado en directo por Aragón TV.
Foto: Estela Martínez.