Diez equipos se quedan sin marcar y solo uno pudo anotar más de un gol

La primera jornada de Liga resultó muy curiosa por cuanto fue totalmente anticasera, con una sola victoria local frente a cinco visitantes y cuatro empates. Y también resulta muy destacable el que diez equipos no consiguieran marcar (siete locales y tres visitantes), pero es que solo hubo un equipo que anotara más de un tanto. Parece que a los equipos les importa mucho más mantener su puerta a cero que buscar la portería contraria. Solo se han marcado once goles y, posiblemente, será muy difícil que los equipos empeoren este negativo score. En esta jornada, un anotar un tanto ha sido como encontrar un tesoro.

Valencia-Mestalla, Alcoyano, Mallorca y Villarreal B enseñan muy pronto  sus credenciales y lograron inaugurar la competición venciendo a domicilio. El Valencia-Mestalla lo hizo en la Ciudad Deportiva (0-2), siendo el único equipo que ha marcado más de un gol. El Alcoyano lo hizo ante un Llagostera que ya no juega en Palamós y lo hace en su localidad. El Mallorca se deshizo del debutante Peralada mientras el Villarreal B obtuvo un triunfo de prestigio en el campo de otro aspirante al play off como es el Atlético Baleares. El Formentera no pudo tener mejor debut y se llevó los tres puntos del también conjunto balear y debutante Peña Deportiva.

Un claro aspirante al play off y al título, como es el Elche, no pudo pasar del empate sin goles en el feudo de un Sabadell que pretende no pasar los apuros de la campaña pasada. Badalona y Lleida, dos equipos llamados a luchar por la zona noble, empataron a un tanto, mientras que el debutante y nuestro próximo rival, el Ontinyent, igualó sin goles ante el Cornellá. La gran sorpresa de la jornada es el empate que el debutante Olot arrancó en el Rico Pérez ante el Hércules (1-1).

BUENAS SENSACIONES, MAL RESULTADO. Con un equipo totalmente nuevo, pues solo Alfonso, Forte y Pajarero jugaban la temporada pasada, el C. D. Ebro no realizó un mal partido y tuvo opciones para traerse al menos un empate. Un gol encajado tras un gran disparo de Juliá, con una gran dosis de fortuna pues el balón golpeó en el larguero y luego en la espalda de Salva, nos derrotó. Toca seguir trabajando, las sensaciones son buenas y solo falta plasmarlas sobre el terreno de juego.

Foto: @cdebro.

 

 

Comentarios